BIENVENIDO, Invitado ( Identifícate | Registrase )
![]() |
![]()
Publicado:
#1
|
|
![]() Advanced Member ![]() ![]() ![]() Grupo: Members Mensajes: 3.748 Desde: 11-March 08 De: Spain Usuario No.: 1.510 ![]() |
Hasta el infinito y mas allaaaaaá...!
![]() Las cosas no son como empiezan, sino como terminan. Pedro, siempre contigo. Ánimo Fernando! (que no corran que es peor) -------------------- No se trata solo de ganar; se trata de correr, de competir, de ir lo más rápido posible!
|
|
|
![]() |
Respuestas
![]()
Publicado:
#2
|
|
![]() Advanced Member ![]() ![]() ![]() Grupo: Members Mensajes: 4.049 Desde: 11-March 08 De: Cayman Island Usuario No.: 1.412 ![]() |
Aqui van dos opiniones sobre Alonso.
Esta es de Joaquin Verdegay, en EL MUNDO "Alonso ganará alguna prueba esta temporada" JOAQUIN VERDEGAY Resulta incluso banal añadir palabras a lo sucedido. Quienes lo vieron, tantos y tantos, en directo o a través de la televisión, seguramente no necesitan corolario alguno para una carrera perfecta, en un circuito perfecto y con una organización maravillosa. Y, ¡cómo no!, Fernando Alonso. Ya conviene hablar de él más allá del lógico sentimiento de identidad nacional, incluso vulnerando los márgenes del automovilismo.Estamos ante un deportista formidable, uno de los que aparecen cada 10 o 12 años, ante un hombre con un talento fuera de lo común. Ayer, con un coche inferior en potencia, pero muy bien equilibrado en chasis y tracción, fue capaz de luchar, mano a mano, con los hermanos Schumacher y Barrichello. Los demás dejaron de existir para este recién llegado. Ni un sólo fallo en las 65 vueltas, ni de él ni de su equipo. Porque el menor de los Schumacher cometió dos errores, uno cuando luchaba contra su hermano y otro en competencia directa con el piloto español. Pero, obviamente, para ser segundo no basta con mantenerse al margen de los fallos, sino que hace falta provocar la pifia ajena. En el tramo definitivo de la carrera, Alonso le metió el morro a Ralf de una manera prácticamente insólita, en un punto crítico.Le obligó a estar más pendiente del retrovisor que de lo que tenía delante. Fue el gesto de un piloto cuajado, frente a adversarios que cuentan con 20 veces más experiencia que él. ¿Hasta dónde puede llegar? Como bien dijo en su día Vallejo Nájera, la Fórmula 1, al igual que los toros, exige un plus de inteligencia natural para moverse con singular prudencia en profesiones caracterizadas por el riesgo. Sabido es que el discurso del chaval circula varios kilómetros por detrás de las expectativas de los aficionados, algo lógico porque sabe en qué deporte se mueve y es consciente de la extraordinaria aventura de cualquier carrera automovilística de esta categoría. Existe la suficiente base empírica para pensar que va a estar en lo más alto del podio esta misma temporada. Particularmente, estoy absolutamente convencido de ello. Quizás, desde fuera, para gente no demasiado introducida en este deporte, no se haya valorado lo suficiente el hecho de que haya concluido todas las pruebas hasta la fecha. Mirando hacia delante, y con el plus de confianza de un coche que ganará en fiabilidad conforme avance el curso, tampoco es un pronóstico aventurado en exceso. El y su entorno saben que conviene mantener la calma, no precipitarse cuando esto acaba de empezar. Alonso habla cuando debe, en los circuitos, y eso, como demostró de nuevo ayer, lo sabe hacer como nadie. Ya se encuentra, por derecho y al margen de lo mucho que está por venir, en la historia de este deporte. Joaquín Verdegay es vicepresidente de la Federación Española de Automovilismo y comisario de la Federación Internacional de Automovilismo para Fórmula 1. Y esta, de Santi Segurola, en EL PAIS "Sólo Schumacher detiene en Montmeló a un arrollador Alonso" El piloto asturiano consigue en el Gran Premio de España su tercera subida al podio, la primera como segundo, y ya es el tercero en la clasificación general del Campeonato del Mundo de Fórmula 1 Sólo el gran Michael Schumacher se interpuso ayer entre Fernando Alonso y la victoria en el Gran Premio de España de fórmula 1. El español, cuyo destino como próxima estrella del automovilismo parece fuera de cualquier duda, se aproxima a una meta que parecía inalcanzable en un país sin tradición en esa especialidad. Por delante tuvo un ferrari conducido por uno de los mejores pilotos de la historia. O sea, dos leyendas reunidas: el coche rojo y el as alemán. No es poca cosa para un muchacho de 21 años que aprende como conduce, a una velocidad vertiginosa. Alonso pertenece a la raza de los predestinados. Primero fue el niño que producía admiración en el reducido grupo de iniciados del automovilismo. Pronto corrió la palabra de su talento. En las categorías que sirven como cantera de la fórmula 1 adquirió el rango de los elegidos. Los expertos vieron en él todas las condiciones de los campeones, concretadas ahora en carreras como la que ofreció ayer en Montmeló. Es evidente que aquellas predicciones se ajustaban a la realidad del ingenio de Alonso, convertido instantáneamente en la gran noticia del año en el deporte español. Probablemente los expertos eran capaces de detectar lo que de diferente tenía el piloto español en la pista. Pero eso no explica suficientemente su arrollador éxito. Alonso ha tenido tres cualidades esenciales en el duro tránsito de las categorías inferiores a la suprema del automovilismo. Por un lado, se armó de voluntad y paciencia para superar las decepciones en Minardi, la escudería que le permitió ingresar en la fórmula 1. No le debió de resultar sencillo aceptar las limitaciones de aquel coche, pero, lejos de ablandarle, aquella aventura sacó lo mejor de su espíritu competitivo. Alejado de las pistas en la anterior temporada, Alonso aprovechó el tiempo para aprender como probador de Renault los secretos de su nueva cabalgadura. Aprendió mucho y muy bien, por lo que parece. Hay otra cualidad que merece destacarse en el asturiano: la ambición que acompaña a los grandes campeones, la clase de ambición que viene acompañada por el sentido de la oportunidad. Alonso no ha perdido el tiempo ni ha sentido complejo alguno. Frente a los míticos ferraris, mclarens y williams, ha lanzado un desafío impensable con el nuevo Renault. Los resultados están a la vista. Ayer fue el segundo en Montmeló. La victoria cada vez se antoja más próxima. Un tercer analisis de Victor Seara, de EL MUNDO "Alonso asciende otro peldaño al terminar segundo en Montmeló detrás de Schumacher" ALONSO MEJORO SUS DOS TERCEROS PUESTOS ANTERIORES AL ACABAR SEGUNDO EN EL CIRCUITO DE MONTMELO - EL PILOTO ESPAÑOL ADELANTO AL FERRARI DEL BRASILEÑO BARRICHELLO Y ACOSO A MICHAEL SCHUMACHER, DE NUEVO VENCEDOR MONTMELO.- Fernando Alonso no parece tener límites. En su país, donde ningún piloto español había conseguido siquiera puntuar en un Gran Premio de Fórmula 1, el asturiano escaló un peldaño más en la Historia, sólo superado por el monarca Michael Schumacher al que pretende suceder en el futuro. Tras su tercer podio, ya no hablamos de una utopía. Cuando cruzó la meta en segundo lugar, un estado de locura general se apoderó de Montmeló. No era para menos. Alonso respondía a la expectación creada para totalizar cinco carreras, todas en los puntos, y tres podios. Imposible imaginarlo antes de que comenzase esta temporada que hasta el momento deja un saldo para asustar a los rivales. Alonso es el único piloto que ha terminado todas las carreras en los puntos, a lo que hay que sumar dos terceros puestos y un segundo, y la tercera posición en la clasificación general del Mundial. Todo este presente glorioso de Alonso se viene fraguando desde hace tiempo. Tiene unas condiciones innatas que son la nueva sensación del paddock. Ya hay quienes comentan que su futuro puede estar en cualquier parte, mencionando equipos de todo rango, incluso McLaren o Williams. Pero lo cierto es que Alonso tiene un blindaje que le costará mucho romper a quien pretenda llevarse al nuevo niño prodigio de la Fórmula 1. La otra base es técnica. Al excelente chasis diseñado por el equipo de ingenieros que comanda Mike Gascoyne, le falta un motor a su altura. Un motor que ayer dejaba a Alonso sin posibilidades en los sectores veloces, pero era tan endiabladamente veloz en lo sinuoso, que recuperaba y superaba rivales con una velocidad punta muy superior, como los Williams. Poco le faltó para doblar a Montoya, con quien compartió charla en el desfile de pilotos.Entonces Michael Schumacher le preguntó acerca de las banderas asturianas que comparten color con las de Renault. Como es habitual, Alonso lo dio todo en la pista. Tuvo en cada momento en el punto de mira al nuevo Ferrari de Schumacher, pero era demasiado. El alemán controló la carrera aunque siempre tuvo detrás a Alonso. El español intentó lo imposible y se vio encerrado por los dos Ferrari en el momento de la salida. Los coches rojos no le permitieron la irreverencia y lo relegaron a la tercera posición, aunque Barrichello tuvo que ver la hierba y de milagro no provocó una carambola que sí se produjo detrás de ellos, cuando Raikkonen embistió por detrás al Jaguar de Pizzonia, detenido en la parrilla. Fue el final de la carrera para el que aún sigue mandando en el campeonato. Pero ya le acechan varios. Uno de ellos es Alonso. El asturiano sigue fiel a sus declaraciones y a su estilo. Antes de la carrera decía ver el podio «lejos, pero en Malasia también lo veía lejos y luego...». Y luego llegó el primer podio del año. Pero si ya lo de Malasia y Brasil no tenía precedentes, lo hecho en el circuito de Montmeló le hace entrar en un nuevo estadio de cara al futuro. Y eso que el español tuvo un día de locos. Debió presentarse en tres convocatorias de prensa sólo un par de horas antes de la carrera. Allí explicó lo más sobresaliente del circuito ante unas 50 personas, después de haber sorteado cientos de fans que lo aclamaban en los pasillos. Mientras, en Renault todo era cálculo: ¿Podrían de verdad con los Ferrari? La incógnita comenzó a despejarse cuando el coche de seguridad dejó la pista y se zambulló en el garaje. Había estado delante del pelotón por espacio de cinco vueltas, después de las cuales Michael Schumacher aceleró a pleno, mientras Barrichello le cuidaba las espaldas y Alonso pisaba los talones al brasileño. Fueron vueltas de observación entre los coches rojos y el asturiano, que se había quedado solo para defender los colores de Renault, ya que Coulthard echaba de la pista a su compañero Trulli en los primeros metros, haciéndole abandonar de inmediato. Repostajes En la vuelta 17 llegó la primera detención de Alonso y más tarde la de los dos Ferrari. McLaren completaba su debacle con Coulthard fuera de carrera en ese momento, al tiempo que los Williams ganaban algo de terreno, al colocar a Ralf Schumacher y Montoya detrás de Alonso. Lo que no hubo fue mucho espacio para las estrategias. No había forma de escaparse de las tres paradas y los Ferrari y su sombra azul y amarilla hicieron exactamente lo mismo. No era broma lo de Alonso. En Ferrari comenzaron a echar cálculos rápidamente porque algo se les venía encima. El primer toque de atención lo habían tenido en la primera detención. Entonces Alonso ya era segundo, relegando a Barrichello, y estaba a sólo dos escasos segundos del Ferrari numero uno. La fiabilidad era una incógnita para ellos, pero el campeón debió apretarse el cinturón y olvidarse de sus cómodas victorias del pasado. Detrás tenía a un asturiano con hambre de triunfo. Las banderas con la Cruz de la Victoria se agitaban cada vez más al paso del Renault numero ocho. Michael Schumacher parecía tener bajo control la situación, pero por muy poco. Cuando apenas se superaba la veintena de vueltas, la persecución iniciada por Alonso sobre el pentacampeón del mundo la observaban expectantes miles de personas, aunque una parte de esa inmensa cantidad sufría de manera diferente y se preguntaba una vez más hasta dónde iba a llegar su ídolo. Michael Schumacher aceleró y se alejó muy poco con su modelo F2003-GA, que iba a 14 kilómetros por hora más que el Renault, pero el español se las compuso para recuperar en las curvas, donde obtuvo el mejor tiempo parcial a base de chasis y de conducción.Los terceros repostajes apenas trajeron novedades, manteniendo el Ferrari numero uno su ventaja tras doblar a varios corredores.Alonso debió batallar con más de uno, y alguno se llevó una reprimenda, como Ralf Schumacher, que bloqueó peligrosamente al asturiano, con el que unas cuantas vueltas antes había mantenido una dura lucha por recuperar la segunda plaza. Carácter no le falta. El final se acercaba y mientras Michael Schumacher seguía su camino, la multitud esperaba ya un percance del alemán, porque las diferencias se habían estirado demasiado. Ya eran más de seis segundos. Alonso no ganaría el Gran Premio de España, pero faltaría poco. Aún así, las sidras comenzaban a descorcharse.Era el colofón a un día irrepetible. Alonso empezó a ser asediado nada más bajar del podio, donde hizo señas a todos sus conocidos y familiares de que más tarde hablaría con ellos. Dos horas después de la carrera, aún no se había podido quitar el traje. Y apenas había podido saludar a su madre, Ana, que acababa de recibir el regalo más inolvidable.Había bajado poco antes de una zona vip donde vio la carrera en compañía de su hija Lorena. El padre de Alonso, el siempre atento José Luis, había visto la carrera solo en el camión del equipo. No hubo abrazos con su mujer, sin tiempo ni siquiera para ello. Debió buscarla con prisas con un móvil: «Es el Príncipe Felipe», le dijo al oído. El heredero de la Corona transmitió la enhorabuena a la madre de otro heredero. Y la ultima, de Manel Serras, para EL PAIS: "Locura azul en la "pelouse"" Más de 3.000 asturianos vibran alucinados con su paisano, su nuevo ídolo, al grito de "¡adelante, campeón; eres el más grande! Aquello fue la locura. Ahí estaban todos, sentados en la hierba, sobre toallas, mantas o en sillas plegables. Eran más de 3.000 y se situaron alrededor de la zona de la Moreneta, unas curvas después de la recta de tribuna. Allí fue donde los asturianos que se desplazaron al circuito de Montmeló vivieron la mejor carrera de su nuevo ídolo, Fernando Alonso. "Verle liderar la carrera fue lo más grande", explotó con los ojos casi nublados por la emoción Ángel, un gijonés de 48 años que atravesó media España en una furgoneta junto a otros siete compañeros para animar a su paisano; "no me importa el viaje, ni lo que hemos gastado, ni las incomodidades. Todo vale por verle acabar el segundo". Instalado en una curva sin pantalla y sin visión de los marcadores gigantes, Ángel se enteraba del desarrollo de la carrera por la radio o porque algunos de sus compañeros la estaban viendo en una pequeña televisión portátil. "¡Ahora va líder!", exclamó Agustín, de pronto, cuando Alonso tomó el mando de la carrera en la vuelta 36ª -luego volvió a serlo en la 50ª- porque el alemán Michael Schumacher y su Ferrari, el campeón incuestionable, habían entrado en los talleres a repostar. Entonces sonó un gran aplauso en toda la pelouse y volvieron a ondear las banderas azules de Asturias y de Renault. Vivían su fiesta. Y Alonso la fue haciendo más grande a medida que la carrera iba avanzando. "Nosotros venimos de Pola de Laviana", comentaba Marian; "hemos venido cuatro en coche. Y ha valido la pena". "Le seguimos desde siempre", agregaba Carmen, desplazada desde Gijón junto a su esposo, Luis, y su hijo, Alejandro, de cuatro años; "pero esta vez hemos decidido viajar a Montmeló para sentirnos más cerca. No le vemos todavía como campeón del mundo. Pero nos ha dado ya muchas satisfacciones". Carmen y los suyos estuvieron en Montmeló los cuatro días de la carrera y se gastaron unos 800 euros. "Lo más difícil", contaban, "fue el alojamiento. Tuvimos que desplazarnos a Barberà del Vallès, cerca de Sabadell". La Peña Fernando Alonso, de Oviedo, realizó una oferta de viaje de unos 240 euros que incluía el autocar, el hotel y la entrada. "Más barato, sí. Pero así vamos a nuestro aire", remataba Carmen. De pronto, la pelouse vivió otro gran albotoro. "¡Es segundo y le lleva más de cuatro segundos a Barrichello!", se oyó. La carrera había entrado ya en su fase decisiva y en la vuelta 41ª Alonso recuperaba el segundo puesto, tras pasar por los boxes y haberla perdido durante tres vueltas. "¡Adelante, campeón!", "¡Eres el mejor!", "¡Viva Asturias!". Volvían a surgir las pancartas de "Alonso campeón", "Cañete está contigo", "Alonso, el más grande". Ondeaban de nuevo las banderas, se agitaban las gorras. Todo valía. "Es estupendo. Increíble. Estoy alucinado", aseguraba Carlos, de Pola de Siero, que viajó el viernes junto a nueve amigos. "Imagínese lo que eso supone para Asturias", exclamab a Daniel, de 17 años, que corre en karts y hace auto-cross y que había coincidido con Alonso en sus últimos años de karting en Asturias. "Nos conocimos", explicaba; "antes no le seguía nadie; bueno, sólo los que estábamos muy metidos en el mundo del motor. Pero ahora es la locura. Algunas veces le he visto por Oviedo, pero allí no le dejan tranquilo. Es muy bueno. Veo muy difícil que salga otro que lo sea tanto como él". La carrera concluía. Alonso acababa el segundo. Y, al pasar por delante de la Moreneta, ya en la vuelta de celebración, reducía la velocidad y se acercaba a la banda con los brazos levantados. Era su forma de darles las gracias, de reconocer que también él tiene un motivo especial para estar donde está, para hacer lo que hace, para luchar por ser el mejor: responder con su esfuerzo y con sus éxitos a una afición que le sigue entusiasmada. Montmeló vibró con este nuevo ídolo de la fórmula 1 que, junto con Ralf Schumacher, es uno de los dos pilotos que ha puntuado en las cinco carreras que se llevan disputadas del Mundial. Al bajar de su coche, Michael Schumacher fue el primero en felicitarle. Alonso se acordó entonces de los aficionados. "Ellos fueron mi séptima velocidad", dijo. Al margen de los 250.000 espectadores que pasaron por Montmeló en los cuatro días del Gran Premio de España, la alonsomanía se ha paseado este fin de semana por todo el país. Ayer era imposible encontrar una sola gorra azul de Fernando Alonso y Renault en las tiendas del circuito. Tampoco podían comprarse camisetas o pañuelos azules del asturiano. Esom a pesar de que una gorra cuesta 30 euros y una camiseta 60. "El fenómeno nos ha desbordado", reconoció Carlos Álava, responsable de prensa de Renault en España; "no esperábamos que Alonso despegara tan rápido, ni mucho menos la fiebre que han desatado todas sus cosas en el mercado. Las existencias se han agotado no sólo en el circuito, sino en toda España". bueno, espero no haberos aburido mucho, simplemente era por si no habiais leido algunas de las cronicas sobre Alonso mas recientes. Que os aprovechen. ¿Os habeis fijado que el FBI, despues de 3500 años, ha descubierto al verdadero asesino de Tutankhamon? ¡Eso si es eficacia! Que tiemblen los asesinos de Viriato y de Kennedy... -------------------- Si te interesa ahorrar en Telecomunicaciones, Seguros o cualquier otro sector, quizá puedas contratarme...RA-TA-TA-TA-TAA
www.jesusbardon.es info@jesusbardon.es |
|
|
Mensajes en este tema





































































































































































































![]() ![]() ![]() |
2 usuario(s) está(n) leyendo este tema (2 invitado(s) y 0 usuario(s) anónimo(s))
0 usuarios(s) registrado(s):
Fecha y Hora Actual: 1st May 2025 - 05:09 PM |